C

15.5.14

7.5.14

Me convencía cada mañana que la noche sería estar sin ti. Me convencía al desayunar que lo dulce no era para mi. Si miraba por mi ventana podía ver los cientos de hojas flotando sobre el suelo, como si yo misma pudiera flotar sobre ellas. Dejarme caer y mirar el cielo que es tan difícil de ver. El cielo tan azul que lo he olvidado. Tan profundo que lo he subestimado. Me convencí que el dejarme caer sería no caer parado. Dejarme flotar. Dejarme. Dejarme pensar que merezco algo dulce por la mañana. Dejarme intentarlo. Dejarme sentir el tener algo en qué creer. Me convencí que decidir entre dejarse caer sería tan frágil como dejar de creer.

10.2.14

3.1.14

Promoción

Promociones de la semana. Promociones a la vuelta de mi casa. Promociones ignoradas en el suelo de mi coche, en el asiento del copiloto, en la puerta, en el sucio parabrisas. Promociones en Internet, con quien platico, en mis búsquedas, en mi trabajo, en mis mensajes. Promociones en mi comida, en la despensa, al cruzar la calle, en las noticias, en las alcantarillas pegadas y mojadas. Promociones de temporada, por colores, por orden alfabético, por edades, por tamaños. Promociones en el aire. Promociones que debo tener más amigos, promociones que debo tener un mejor trabajo, promociones para mi futuro, para mi bolsillo, para mi descanso, para entretenimiento, para mi estado de ánimo. Promoción que de acuerdo a su definición no hace elevar mi condición de vida. Promoción, promo, pro, p..., moción, emoción, loción, canción, mansión, violación.

26.11.13

Te miraba desde el balcón y me preguntaba por qué caminas tan lento. Es de noche y apenas alcanzo a distinguir que no es de color negro lo que llevas puesto. Pretendo adivinar si girarás a la derecha en la siguiente calle pero me equivoco una vez más, me equivoco no por no conocerte, me equivoco porque quiero saber si en algun momento mi intuición dejará de defraudarme. Me siento a escribir por un año, escribo tanto como nunca había escrito de mi en toda la vida. Escribo tanto que mi letra comienza a tomar un estilo que me desagrada. Escribo cartas, escribo descripciones, analogias, escribo porque sueño ahora con gatos que se convierten en humanos, que les sirvo café y mantenemos una conversación sobre lo que es ser felino viviendo en una azotea. Me mudo varias veces, me despierto en camas diferentes. Las habitaciones son blancas, los días son cálidos. Te sentí desaparecer entre la obscuridad y me convencí que así sería...

13.11.13

07-13

(Foto, Sayulita)

Me dijeron que quien sueña demasiado es porque necesita desechar el subconsciente. Desechar a dónde? Recuerdo más el sueño que tuve anoche que lo que hice en la mañana antes de salir a trabajar. Sueño sueños que no se repiten. Sueño con gatos. Sueño con mi gato gris a rayas que desapareció hace más de 10 años. Sueño que se pelea con otros gatos, gatos callejeros, sucios y agresivos, que quieren entrar a mi casa. Sueño que mi gato regresa. Sueño que no despierto. Puedo soñar que estoy despierta, sueño que me veo dormida. Sueño que platico lo que estoy soñando dentro de lo que estoy soñando en ese momento. Yo sé volar. Se brincar de lo más alto y flotar. También se correr, elevarme y planear. Sólo despiértame cuando esto haya terminado.

23.10.13

no.9

19.10.13

19-1

Camine deprisa por querer distraerme en que te venia pensando. Dar los mejores largos pasos nunca antes vistos sin sentirme ridiculamente deforme. Memorizar cada rostro con el que intimamente cruzaria cada mirada, sin sentirme intimidada, por cada esquina, por cada cuadra, con cada clima. La señora de los buñuelos comienza a reconocerme, lamento no comprarle señora pues siempre llevo prisa por querer dejar un paso atras lo que vengo pensando. Lo que vengo narrando. Lo que pretendo estar dejando.

No podria importarte menos que mi intencion es natural. No podrias saber que me importa tanto que completes tu mision, sin mojarte, sin romperte en tres, por tres, por dos, por ti. Insignificante ti. Con mis sueños metiendote, con tus manos enrredandome. Cómodamente sobre mi cabeza. Con mi cabeza. De cabeza.

17.10.13

thumbs

No fue la primera vez que se lanzó de la ventana de un 4to piso para demostrar que es valiente. "Eso ya lo sabemos" decía la veterinaria. No fue el momento que le mencionaba "aléjate de ahí" para que ordenadamente me hiciera caso y restregara su cabeza contra mi pierna en símbolo de lealtad. Confié en su lealtad de la misma manera en que confío en mi responsabilidad.

"Cats with thumbs" pensaba mientras veía su pata fracturada. Pensaba en el comercial. Pensaba en la leche del comercial. Pensaba en los pulgares de los gatos tronando al ritmo de alguna canción. Pensaba en si no sobreviviera al dia siguiente, por algun golpe desconocido y no prevenido a tiempo, entonces no iría a trabajar. Pensaba en poner alguna estupida excusa para evitarme la pena de llorar por una ridícula situación. Pensaba en que me llevarías un café muy caliente a la escuela por apoyo emocional, como cuando me robaron mi laptop. Y pensé que no tendría quien se tomaría la molestia de hacer eso en tu no-lugar. Te dije hoy que "nos tienes" bien cabrón. Y lo creo. Lo creo más que en la recuperación de Piraña. Una recuperación incompleta que posiblemente no se lleve a cabo y eso no me hace valiente.